Delapiel ampollas Renovación

El ácido glicólico arrastra y elimina las células muertas, dejando al descubierto las células más jóvenes y vitales. En consecuencia, potencia el rejuvenecimiento de la piel, dejándola suave y tersa.

Las células de la piel están unidas y el ácido glicólico lo que hace es separarlas, potenciando la oxigenación de las células jóvenes, favoreciendo así la renovación celular y, por consiguiente, la imagen de un rostro con menos signos de envejecimiento y más luminoso.

La acción del ácido glicólico es tan potente que siempre (¡SIEMPRE!) debes aplicar protección solar de alto SPF a la mañana siguiente después de utilizarlo, ya que la piel queda muy expuesta a los efectos dañinos del sol. 

Tiene un alto poder bactericida que ayuda a evitar que los microorganismos responsables de los problemas de acné y otras imperfecciones entren en escena.

¿Cómo y cuándo lo aplicamos?

Por la noche, antes de dormir. Como ya sabemos, el proceso de regeneración de la piel se produce por la noche. 

Respecto a su frecuencia, dependerá del tipo de piel y de la época del año. Las pieles más sensibles deben adaptarse a este activo poco a poco, limitando su uso a pocas noches por semana. 

Las estaciones más frías del año son las más indicadas para renovar la piel con ácido glicólico.